sábado, enero 22, 2005

aventura

El chico quería experimentar. No quería quitarse de Lima sin vivir a pleno la huevada. Le habían contado, lo había leido, lo había visto por la tele en alguno de esos especiales de cosas raras. Y quería hacerlo.

Salimos de la universidad y quisimos tomar un taxi rumbo a su hotel para encontrarnos con más gente. Se negó rotundamente. Se negó una, dos y hasta tres veces. Quería tomar una combi. Una pequeña montaña rusa a lo largo del par de kilómetros que nos separaban del hotel.

Subimos en mancha, 4 webones en terno. El tío y su amigo, ambos cuencanos de cuenca, sentados y los limeños parados. Con el dejo característico comentaban acerca de lo que iba a ser su experiencia.

No pasaron ni 100 metros hasta que se llegó a la primera "curva" entre la mar y universitaria. La clásica maniobra brusca. La fuerza centrífuga hizo que todos tengamos que sujetarnos con mas fuerza de donde pudiéramos. Todos menos ellos. Alzaron los brazos y pegaron un grito, cual montaña rusa vieja del play land park.

El camino no presentó mayor novedad. Llegamos al destino e inmediatamente se juntaron con el resto de la delegación para contar la gran experiencia. Algunos los miraron con sorpresa, otros con envidia. Parecía que ya habían comentado acerca de lo que podría ser un viaje en combi.

Creo que fue lo mejor del viaje que hicieron.

Hey hey I said
Near as I can figure
You gave me life now
Show me how to live

5 comentarios:

CeCiCa dijo...

play land park???¿¿¿¿...
jaaaaaaaaaaaaa...
hace 15 años visitaba ese sucucho!!!!!

y lo del viaje en combi es...
o-b-l-i-g-a-t-o-r-i-o
para decir que conoces Lima Limon!

Juan Arellano dijo...

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diego dijo...

gracias, gracias... se lo dedico a mi perrita q está ladrando...
ya, fuera d wadas... cheere q t haya parecido interesante

Flavio dijo...

Me parece chévere que hayas hecho un post gracioso acerca de las combis, en vez de un análisis quejoso (que es lo que usualmente escribe uno cuando quiere hablar sobre las combis.)

¿En serio existieron esos 4 tíos en terno?

diego dijo...

yo fui uno de los limeños que se aferró al pasamano